SOBRARBE JOVEN



martes, 18 de mayo de 2010

sección nuevas tecnologías de Pablo, de Boltaña


Buenos días queridos oyentes:
Después de tres programas sobre los transgénicos a vueltas, vamos a cambiar la ruta de la ciencia para volver a hablar, como ya hicimos con anterioridad, del universo. En este caso será de los AGUJEROS NEGROS.
¿Qué es un agujero negro? Pues es una región finita del espacio-tiempo provocada por una gran concentración de masa en su interior, con una enorme densidad, generando un campo gravitatorio tan potente, que ninguna partícula material, ni siquiera los fotones de la luz, pueden escapar de él.
Históricamente la idea de Agujero negro apareció por primera vez en un artículo de John Michell en 1783, escrito a la Royal Society. Ya entonces se conocían algunas teorías gravitacionales como la Teoría de Newton de la Ley de Gravitacion Universal). Gracias a esta teoría y al concepto de velocidad de escape, Michell calculó que un cuerpo con un radio 500 veces el del sol y su misma densidad, tendría en su superficie una velocidad de escape igual a la luz y sería invisible.
En 1915, Albert Einstein desarrolló la Teoría de la Relatividad general, con la que Karl Schwarzchild logró conocer la solución a las ecuaciones propuestas por Einstein donde un cuerpo pesado absorvería la luz. Más tarde, otros científicos, entre los que figura Stephen Hawking, lograron desentrañar los misterios que nadan en un agujero negro, lográndolos clasificar en tres tipos según su masa:
1) Agujeros negros supermasivos: Con masas de varios millones de masas solares. Se cree que se hallan en el centro de muchas galaxias.
2) Agujeros negros de masa estelar: Se forman cuando una estrella de masa 2'5 veces mayor que la del sol se convierte en supernova e implosiona.
3) Microagujeros negros: son hipotéticos y más pequeños que los anteriores, los de masa estelar. Pueden llegar a desaparecer en un periodo relativamente corto.

Esta clasificación se basa en parámetros establecidos de la masa del agujero pero los científicos admiten que se podrían dar casos de agujeros que no cumpliesen esta clasificación.
En fin, esto es todo por hoy. Espero que hayáis disfrutado!

Pablo. 4º de la ESO. Boltaña

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